jueves, 19 de julio de 2012

Comportamientos ante un triunfo histórico (Eurocopa 2012)


España siempre ha sido un país lleno de contrariedad. La bipolaridad está a la orden del día, al igual que la crítica. Si un extrangero tuviera que definir a una persona española, crítico o crítica (o mejor dicho CRITICÓN) sería una de los primeros adjetivos que usaría.


"Quejarse por quejarse", una frase muy utilizada por mi persona. La pura verdad. Si hay algo nos quejamos de ello, si no lo hay nos quejamos por ello. Tenemos ese afán por buscar más y más pero sin hacer nada para conseguirlo. Y si podemos hablar haciéndonos los sabios lo hacemos, aunque no tengamos ni idea. La intención es lo que cuenta ¿no?


Más de dos semanas. Creo que es el tiempo oportuno para que se pueda entender lo que quiero expresar, como si de un hecho histórico se tratase, el cual hay que mirarlo con un margen de tiempo para no dejarnos influir por factores externos, partidistas, ideológicos, etc.


Como decía antes, más de dos semanas. Ese es el tiempo que ha pasado desde que la selección española de fútbol consiguiera su 3ª Eurocopa y su tercer título consecutivo. Motivo de alegría. O eso creía yo.


Antes de empezar dicho campeonato, ya existían críticas a la selección española. Y durante el campeonato las críticas llovieron sobre jugadores, seleccionador, periodistas, etc. Son cosas que entiendo pero que personalmente no comparto. No me queda más remedio que entenderlo, pues vivo donde vivo, en España. La crítica y las quejas son cosas con las que he compartido muchas experiencias a lo largo de mi corta vida.


Pero (siempre hay algún pero) nunca creí que se llegara a tanto, en cuanto a críticas, tras la victoria de la selección española en la eurocopa. En twitter predominaban dos TT ese día en España: uno sobre la victoria de la selección y otro, desgraciadamente, sobre el incendio de Valencia.


Yo pensaba que el fuego de Valencia, a la misma vez que devoraba los bosques, también calcinaba parte de la alegría que debíamos sentir todos los españoles por el triunfo deportivo. Me equivoqué, pero no iba desencaminado, sino que ese fuego que devoraba la alegría no era el fuego de Valencia sino los mismos españoles.


Decenas de imágenes con eslóganes como "No hay mayor idiota que el obrero patriota del estado que lo explota", críticas a Xavi por salir con la bandera de Cataluña mientras celebra el triunfo, referencias a la crisis, prima de riesgo, recortes, etc.



¿Qué pasa? ¿Es que si un obrero es patriota ya tiene que ser idiota? ¿Y si uno es patriota es explotado por el estado? A mi me parece que estamos muy confundidos. Cualquier persona puede sentirse patriota y no por ellos tiene que ser idiota y mucho menos ser explotado. Una persona puede ser patriota, sentirse español o española tanto si es obrero como empresario o político. El patriotismo no entiende de clases sociales. Es un sentimiento que puede sentir cualquier persona y si, llegar a fanatismo, entonces es cuando llegaríamos a un estado de idiotez, pero no es idiota el patriota sino el fanático irresponsable. Como siempre se confunden y se asocian términos que no tienen por qué tener relación.

Dicen que Xavi Hernández no se siente español sino catalán y por ello es muy criticado. Se puede entender la crítica pero lo que no se puede hacer es alabar a una persona por su buen juego, por hacer que se ganen títulos y luego criticarlo por sacar una bandera, que también es amarilla y roja, pero con más rallas de normal (la bandera de Cataluña). Esa crítica para mi no tiene fundamento. Yo soy andaluz y me siento español. Si yo fuera uno de esos jugadores no dudaría en sacar la bandera de Andalucía al igual que Xavi luce la de Cataluña y sin embargo, no creo que cayeran tantas críticas sobre mi. 

Y por último tenemos las imágenes que hacen referencia a la crisis. Imágenes y comentarios que nos invitan a dejar de celebrar el triunfo por la grave situación económica en la que nos encontramos y que incluso insultan a los que celebran. A los autores y editores de esos comentarios e imágenes me gustaría hacerles llegar mi opinión. 

No hace falta que se elaboren imágenes como la anteriormente mostrada para recordar cómo estamos económicamente. No hace falta que se repita una y otra vez palabras como crisis o recortes para recordar que cuando acabe la celebración serán esas las palabras que estarán a la orden del día. 

De verdad no hace falta recordarlo. De eso ya se encargan las neveras y despensas vacías de millones de parados y no parados que las pasan "canutas" para alimentarse y darle de comer a sus hijos. Las libretas de ahorros en números rojos de esas personas que ven cómo aumenta y aumenta la cifra negativa de sus cuentas, al igual que los impuestos y recortes. Personas que encuentran en el triunfo histórico de la selección un descanso mental, una situación de alegría en la que por un momento se evaden (porque no se olvidan) de los problemas. Situación en la que los niños ven sonreír a sus padres después de tanto tiempo. 

Es una situación que como un sueño se esfumará a conciencia de todos y se volverá a lo de siempre. Pero gracias a personas como las que he nombrado antes, ese sueño acaba antes de tiempo. Sólo decir gracias. Gracias por recordar la verdadera situación del país. Gracias por recordar que mañana volverá todo a la misma mierda de siempre. 

Escuché un dicho que decía: "Si hay alguien que hable mal de Almania, es un francés. Si hay alguien que hable mal de Francía, es un ingles. Y si hay alguien que hable mal de España es un español". Así es España, un país de contradicciones. Como he dicho antes. Escribiendo en contra de la crítica te das cuenta de que esto no va más lejos. ¡Otra crítica! Es normal. De lo que se come se cría.